El mundo editorial en estos últimos años se tambalea, la llegada de la piratería y el libro electrónico, la competencia con tantas opciones de distracción como brindan las nuevas tecnologías ha alejado a muchos lectores de los libros. Se venden mucho menos, por tanto hay menos editoriales y las que hay no siempre están dispuestas a arriesgar su dinero en nuevos autores. Por otro lado ahora abundan las editoriales especializadas en autopublicaciones que a cambio de una cantidad de dinero son capaces de sacar a la luz casi cualquier cosa.
1 ¿Cuándo comenzaste a escribir y con qué pretensiones?
Al final de mi adolescencia, tenía un diario en el que aunque reflejaba lo que me pasaba lo hacía de una manera novelada. Aquellos textos, sin ser algo premeditado, resultaban cada vez más poéticos de tal forma que, cuando por fin accedí como lector voluntario al mundo de la poesía, escribirla me resultó un proceso natural. Poco a poco, mi evolución como escritor me hizo adentrarme más en la faceta novelista y autor de cuentos en detrimento de la poesía. Nunca tuve más pretensión que intentar plasmar en un texto mi sensibilidad e imaginación, resultaría pretencioso ir más allá. Ya es bastante con considerar que uno tiene algo que decir lo suficientemente interesante como para ser leído por el resto.
2 ¿Planificas los libros antes de sentarte a escribirlos o surgen sobre la marcha, al hilo de tus pensamientos, sin planificación?
En la poesía el proceso creativo es más anárquico, eso no quiere decir que no haya una cierta planificación interior, pero diferente a la conlleva la elaboración de una novela. Una novela requiere, a mi modo de ver, de un importante proceso de documentación y planificación, la realización de un boceto previo que sirva de guía y permita acotar los márgenes de la historia que pretendes contar es algo que facilita la escritura. En narraciones breves o cuentos esa necesidad es más discutible. Dicho esto desde el punto de vista de mi propia experiencia pero entendiendo que hay muchas maneras de alcanzar un mismo objetivo.
3 ¿Cuál es tu género preferido como escritor y cuál como lector?
Como escritor creo que me desenvuelvo bien en la escritura juvenil y costumbrista. Como lector me gustan las novelas de aventuras y aquellas que relatan hechos históricos.
4 ¿Escribes pensando en un lector específico o crees que cualquier persona es un lector en potencia de tu obra?
Un escritor debe ser libre, no ha de tener cortapisas ni condiciones que enmarañen ni su estilo ni su mensaje. Desde ese punto de vista cuando escribo no pienso en ningún lector, pienso en lo que a mí me gustaría leer.
5 ¿Te costó mucho encontrar editor para tu primer libro?
Tuve suerte, pertenecía a un grupo poético que estaba tutelado en cierta forma por la Diputación de Cáceres y publiqué con ellos mis primeros poemas. Después una colección de cuentos infantiles salieron a luz tras conseguir un premio literario y mis dos últimos libros han encontrado cobijo a través de la Editora Regional de Extremadura. Podría pensar que he tenido suerte con mis publicaciones pero también tengo en mis cajones obras que están a la espera de encontrar editor, algo que, a menudo, resulta frustrante.
6 ¿Qué opinas de los muchos premios literarios que se convocan hoy día?
Depende del momento y las circunstancias, pueden ser una oportunidad o convertirse en una continua decepción. A mí me concedieron un premio poético cuando tenía 19 años y fue el empujón que necesité para seguir escribiendo, desde entonces he tenido la suerte de recibirlos en varias ocasiones y también la desgracia de aguardar la llegada de alguno que nunca llegó. Es posible que actualmente se convoquen muchos certámenes literarios, aunque la crisis económica se ha llevado a un buen número por delante, pero también es cierto que hay mucha gente que escribe. Lo difícil es encontrar algo que destaque, que llame la atención del jurado o del comité de lectura y que sea original. Si a eso le sumas que sea un concurso limpio, aunque la mayoría lo sean, es cierto que la ecuación se vuelve compleja.
7 ¿Vivir de la literatura es una utopía?
A día de hoy creo que sí. Incluso escritores de reconocido prestigio salen en la prensa periódicamente para explicar sus apuros económicos. Otra cosa es que le sumes a la circunstancia de escritor facetas añadidas que hagan de tu perfil algo más mediático y eso te posibilite colaboraciones o intervenciones en actividades relacionadas con la literatura y que puedan reportarte algo de dinero, incluso que puedas llegar a vivir de ello. No es mi caso.
8 ¿Qué diferencias encuentras entre el mundo editorial de tus inicios como escritor y el actual?
El mundo editorial en estos últimos años se tambalea, la llegada de la piratería y el libro electrónico, la competencia con tantas opciones de distracción como brindan las nuevas tecnologías ha alejado a muchos lectores de los libros. Se venden mucho menos, por tanto hay menos editoriales y las que hay no siempre están dispuestas a arriesgar su dinero en nuevos autores. Por otro lado ahora abundan las editoriales especializadas en autopublicaciones que a cambio de una cantidad de dinero son capaces de sacar a la luz casi cualquier cosa.
9 ¿En qué medida crees que pueden ayudar las redes sociales a difundir la obra de un escritor?
En una medida muy alta. En nuestra sociedad la presencia en las redes sociales se ha transformado para los escritores en la manera actual de pasearte por los cafés y las tertulias de antaño. A mí las redes sociales no me entusiasman, creo que el escritor debería limitarse a escribir o a hablar de literatura, no a fotografiarse en la playa o a opinar sobre cualquier cosa que se le ponga a tiro. Personalmente me roban tiempo para hacer otras cosas, como lector me aburre el exceso de entradas banales, dicho lo cual no me impide darme cuenta que es el peaje que, a día de hoy, hay que pagar.
10 ¿Qué opinas del libro digital?
La primera vez que oí hablar del libro digital pensé que no tendría éxito, que nada sería comparable a la sensación de tener un libro de papel entre las manos, de oler las hojas, de oler la tinta, de anotar pasajes en el margen o de subrayar una frase. El primer libro digital que leí fue Drácula, de Bram Stoker, y pronto descubrí que podía pasar el mismo miedo, la misma inquietud y el mismo desasosiego leyendo en papel que en tinta electrónica. Desde entonces alterno una cosa y otra con naturalidad. Este planteamiento será intranscendente para las generaciones futuras.
11 ¿Qué opinas de la autoedición?
En un asunto delicado. Si hablamos de literatura es verdad que habría muchos libros que no deberían salir a la luz, pero eso nos lleva a una visión de la cultura demasiado elitista y a mí me disgustan los elitismos. Dejemos abierta esa puerta y, aunque yo prefiero no pasar por ella, respeto a aquellos que lo han hecho. A los que no respeto es a aquellas empresas desaprensivas cuyo único objetivo es lucrarse de la ilusión y el esfuerzo de escritores que no han tenido la suerte o la paciencia de encontrar su hueco. Yo reivindico la figura del editor, del buen editor.
12 ¿Consideras positivos los talleres de escritura creativa o piensas que no se puede enseñar a escribir?
Claro que sí, todo aquello que pueda ayudar a mejorar el estilo, la técnica, la herramienta del lenguaje, bienvenido sea. Lo que es más difícil es que te enseñen a imaginar.
13 Con el paso de los años algunos escritores acaban eliminando ciertos títulos de su semblanza. Aunque no precisamos conocer el nombre, ¿hay algún libro de los tuyos que te satisficiera en tus inicios, pero que ahora preferirías no haber escrito?
Hay poemas de cuando empecé que reflejan un candor y una inocencia que a la vista de mis ojos de ahora me provocan cierto rubor. Pero lo publicado publicado está, el escritor que se arrepienta quizás debería hacerlo sobre la superficie de un lago.
14 Para ese lector que aún no ha leído nada tuyo, por favor, recomiéndanos uno de tus libros. Cuéntanos brevemente cómo fue el proceso de creación y por qué has elegido ese título y no otro con vistas a nuevos lectores de tu obra.
De mis libros publicados recomendaría “Los viajes de Lucas Ventura” editado por la Editora Regional de Extremadura. Es un libro ambicioso, que recorre la historia de Extremadura desde el punto de vista de un adolescente que presencia determinados momentos fundamentales de nuestro pasado y lo recomiendo porque en Extremadura necesitamos aprender a querernos más y es difícil quererse si uno desconoce de dónde viene. Cualquier iniciativa encaminada a paliar esa carencia creo que debe ser alentada y bienvenida.
El proceso de escritura de un libro con tanto componente histórico como “Los viajes de Lucas Ventura” conllevó un importante esfuerzo de documentación, que a la vez resultó apasionante.
15 Recomiéndanos, por favor, dos libros cuya lectura te haya impactado. Uno de un autor clásico y otro de un autor contemporáneo. (Da igual el género).
Si tuviera que referirme a unos textos clásicos que me marcaran de joven hablaría de poesía y mencionaría algunos autores de la generación del 27. Ningún libro de prosa pudo igualar las sensaciones que me provocaron aquellas lecturas. Ya más recientes, me gustó el estilo clásico de las Máscaras del Héroe de Juan Manuel de Prada, o la difícil sencillez narrativa de nuestro paisano Luis Landero y su Balcón en invierno.
Muchas gracias. Te deseamos mucha suerte en todos tus proyectos literarios.
Gracias a ti por invertir tu tiempo en promocionar la cultura.
Antonio González Prado (Cáceres 1970) comenzó su andadura literaria en 1993 publicando un libro de poemas titulado “De la Memoria Anclada”, editado por la Institución Cultural “El Brocense” y que fue el primer volumen de una colección que, bajo el título de Poesía Pereros, editó la Diputación de Cáceres. En 1994 publicó su segundo poemario titulado «Dos poemas azules y una rosa permanente» también editado por la Diputación de Cáceres. Durante varios años fue colaborador habitual de “El periódico Extremadura” y durante siete años en la Revista Alcántara editada por la Diputación provincial de Cáceres. En 2005 una colección de cuentos infantiles titulados «Rosa Terrosa» fue premiada en la VIII Edición de los Premios de Cuentos Ilustrados de la Diputación de Badajoz, este premio conllevaba la publicación de la obra (actualmente agotada). En Octubre de 2009 publicó la novela “Los Viajes de Lucas Ventura” en donde se relataban algunos acontecimientos de la historia de Extremadura a través de los ojos de su protagonista que, por misteriosas razones, era capaz de viajar en el tiempo. Su edición corrió a cargo de la Editora Regional de Extremadura siendo el primer volumen de una nueva colección destinada al público juvenil de la que se editaron 2.000 ejemplares. En 2015 publicó la colección de cuentos infantiles titulada «Los extraños sucesos del bloque sin ascensor» y editado en la colección «Tigres de Papel» de la Editora Regional de Extremadura. Ha recibido numerosos galardones literarios, en algunos de ellos sus relatos han formado parte de publicaciones colectivas como ha sucedido, por ejemplo, con los organizados por Europe Direct durante los años 2009, 2010, 2011 y 2016. (Blog) (Facebook)
Francisco Rodríguez Criado es escritor y corrector de estilo y trabaja como redactor de contenidos para publicaciones de diversa temática. Su blog Narrativa Breve es uno de los espacios literarios más leídos en lengua castellana. También coordina Literatura.fm, portal de podcasts literarios. El diario Down, testimonio literario sobre la paternidad y el síndrome de Down, es su último libro. (Web) (Facebook).
