Una de las cosas más placenteras que he hecho estas Navidades ha sido releer un librito en edición bolsillo, El cuaderno rojo, de Paul Auster (Booket, 2012), imprescindible para comprender el universo literario del gran escritor estadounidense. El subtítulo del libro, Historias verdaderas, no es marketing. Todo lo que cuenta Auster en estas páginas es real. Eso es lo que él afirma una y otra vez, y yo me lo creo. Y lo que cuenta no son sino breves y amenas historias marcadas por un denominador común: el azar.
La estatua (microrrelato de Francisco Rodríguez Criado)
En cuanto recibieron el dinero del Fondo Estatal, pusieron manos a la obra. Lo harían bien; y en un corto espacio de tiempo, apenas un par de meses. Contrataron a los mejores arquitectos, artistas y filósofos del continente sin reparar en gastos. Así, gracias a la ambición profesional de esos brillantes pensadores y al apoyo económico del contribuyente, fue fraguándose la estatua.